sábado, 25 de junio de 2011

Punto y Banca. Y punto.

Por Tito Yebara

Al llegar mi primera impresión fue bastante negativa, mucha luz blanca y poca gente adentro, además de poco lugar para comer sentado indicaban que ahí no iba a encontrar el elixir redondo, sino más bien una pizza más...
Sin embargo, mientras esperaba a mi fiel compañero, una luz se abrió en el camino: un tachero paró y se bajó a comer una "portuguesa" de parado, al verlo, me envalentoné y como aún era temprano para la reunión accedí al vicio de una faina con una muza arriba, aclarandole al pizzero, "la muzza arriba" el precio fue bastante módico, solo $8 por 3 minutos de placer en la boca...
Ya comenzada la reunión, se procedió al clásico y siempre bien ponderado 1 muzza y 4 faina, para compartir nuevamente con mi gran amigo, esos hermanos que te da la vida pero no la familia.

A primera vista, buena cantidad de queso, las faina demasiado blancas para mi gusto, ya juzgando directamente el sabor, una buena pizza, nada que no se pudiera encontrar en cualquier lado, mejor que varias, pero no mejor que muchas otras... Pasando las porciones de una en una, el sabor fue agradable, no más que la charla, aunque no fue determinante para volver, si paso por ahí con hambre paro a comerme una de parado, pero no iré a buscarla como primera opción.

Este es mi humilde aporte para la primera de, espero, muchas reuniones con el manjar redondo de por medio, y como no, como buena excusa para vernos más seguido.

lunes, 20 de junio de 2011

Una triste despedida

En la vida yo siempre fui un descreído de promesas y de prendas que si las realizáramos se nos cumplirían los deseos que añoráramos, pero cuando hay situaciones que uno hizo lo humanamente posible en el terreno de lo material hay que empezar a creer en los milagros.

Por eso tome una de las decisiones y promesas máss duras que pude imponerme en mi vida: NO COMER PIZZA POR UN AÑO. Esto lo hago para que se me cumpla el deseo de poder mudarme a una casa más grande

Espero que sepan entenderme en esta dura decisión como me entendió mi amigo y compañero de ruta Matías al que no lo dejo solo en este largo y sabroso camino ya que se sumo Roberto "tito" Damián Yebara, otro gran conocedor de ese manjar redondo llamado pizza. Así con estos dos valientes podremos saber cual son los sabores de las mejores pizzerías media masa de Buenos Aires.

Abrazos a todos y nos estaremos reencontrando dentro de un año.

Gracias Gabriel

PD: como decía mi abuela hay que creer o reventar en la vida.

Las cuartetas: pizza con poesía


Llegamos a las cuartetas nuestra primer pregunta es por que el nombre. Así que lo consultamos en Wikipedia:

"Su nombre se explica con un relato, casi una leyenda urbana, que dice que en la década de 1930era comensal del restaurante el poeta del tango Alberto Vacarezza, quien acostumbraba a sentarse en una mesa a escribir sus cuartetas, y luego las colocaba sobre porciones de sopa inglesa.1 Por esta particularidad, los clientes habrían comenzado a llamar al local con su nombre actual."

Al entrar las puertas automáticas nos invitaron a un interior de aspecto familiar y potuliar

(muchas plantas de potus en las paredes ja ja ja)

Llego la pizza y la verdad es que se nos hizo agua la boca, parecía un poema, el queso de bote a bote y con un detalle gratinado, la masa era bien alta y la base estaba quemadita en su punto justo. La faina no desentonaba.

Al probarla fue grande nuestra sorpresa, era como si algo no rimara con esa primera emoción al verla, la cual se fue opacando porción tras porción buscando el sabor que lamentablemente nunca apareció en demasía.

Salimos de las cuartetas contentos con el bolsillo ya que por ahora fue la pizzería que mas barato nos cobró.

Las Cuartetas

Av. Corrientes 838 Tel 4326-0171